Desde la ciudad de Taguatinga-DF / Brasil.
Jueves, 13 de Agosto.
Se repite la rutina del día. ¿Quién no tiene una rutina? Estoy preparado para las clases de hoy.
Accedo a la plataforma sabiendo que la programación de hoy incluye las disciplinas: sociología, física y Lengua Portuguesa.
En la plataforma estaba escrito, desde las 8 de la mañana, que las actividades de la asignatura de Sociología serían publicadas para los alumnos. Pero terminó no siendo, y no sé qué pasó para que eso sucediera. Desafortunadamente, las clases de sociología rara vez se realizan a través de la plataforma de reuniones de Google u otra, a través de conversaciones y debates sobre el contenido del plan de estudios y todo.
Este tipo de fallas actúa como un estorbo para el aprendizaje, pues, de esta manera, se vuelve muy complicado asimilar todas las asignaturas, solo con los diversos videos colgados en la plataforma de otros docentes, y sin sus respectivas explicaciones, para ayudarnos en comprensión.
La clase de física salió maravillosamente bien. El docente presenta un espléndido ingenio a la hora de explicar los contenidos, en todos los días de sus clases. Después de la clase de física, la junta escolar publicó avisos en la plataforma sobre: la hora de entrada, la necesidad del libro de texto al lado del estudiante, la presencia de la botella de agua también.
Al final de todos los informes se demuestra el objetivo del docente, que debe estar enfocado en ayudar al alumno, en lo que respecta al aprendizaje del contenido, no pasar montones de actividades, sino solo cuestiones relacionadas con lo que enseña.
En cuanto al idioma portugués, la maestra siempre está atenta a nosotros. Aplica sus clases en formato de módulo a través de la aplicación remota. De hecho, virtualmente no asiste ni realiza reuniones en Google Meet, pero siempre publica videos que explican el contenido que se verá.
Así, noto que quizás la presencia virtual del profesor en las clases en las plataformas remotas es muy importante para que los alumnos no se sientan abandonados, pero, si no pueden estar en todas las clases virtuales, al menos lo deben hacer como la maestra de Lengua Portuguesa, que además de distribuir los módulos de sus clases, publica videos explicando el contenido.
Hoy no fue tan frustrante como los días anteriores. Una vez terminadas las clases, apago la plataforma y me marcho para el resto del día, incluso buscando algo de tiempo para estudiar y descansar. Espero tener éxito…
Viernes, 14 de Agosto.
Me despierto temprano otra vez, hago mi higiene matutina. Tengo mi desayuno. Es hora de comenzar las clases remotas. Abro mi computadora, accedo a la plataforma virtual de la escuela, sabiendo ya que las asignaturas de hoy son: física, español y portugués.
Con la clase de física todo va bien, como siempre. El docente ya muestra signos de adaptación a esta nueva realidad virtual. Enseña bien el contenido y repasa las dudas que tenemos. Es una metodología sencilla y con resultados. El maestro hace lo que debe hacer. Esto facilita la vida del alumno interesado en aprender.
Es hora de la clase de Español. Un idioma que envuelve a Brasil a través de casi todas sus fronteras. La maestra, como siempre, publica montones de actividades. Nunca realizó una reunión virtual, y no solo para explicar el contenido de la clase, sino también, para no perder el contacto emocional entre profesor y alumnos. Incluso se ignora la necesidad de explicar a los estudiantes la metodología utilizada en la enseñanza del idioma Español, tan importante para la interacción entre Brasil y los demás países latinoamericanos.
No puedo evitar decir que, en mi opinión, existe un cierto desprecio por la enseñanza del contenido. Publica kilos de actividades sin la debida interacción de contenidos y personas. También tomo clases de francés en otra escuela pública y sé que en el estudio de idiomas necesitas interactuar con la conversación, con la escritura y la gramática. De lo contrario, uno pretende que enseña y otro pretende que aprende. Al final, el alumno pierde más que todos, porque el maestro ya está, en cierto modo, con la vida paga …
En la clase de Lengua Portuguesa, la maestra no se reúne en Google Meet, pero publica el módulo de actividad semanal con videos realizados por ella misma enseñando el contenido de la semana, sin perjuicio de nuestro aprendizaje.
Estos fueron los primeros cinco días de mi DIARIO DE BORDO. Veremos que pasará la próxima semana.
Continua…